Matrícula de Honor

La relación con los colegiales no termina exactamente el momento en que se van del Colegio por última vez. Pasa el tiempo y algunos vuelven. En unos casos pasa mucho tiempo. Son esos que se acuerdan del Mayor muchos años después. Cuando se ven en la obligación de buscar un lugar para sus hijos que han crecido y ya están en edad de comenzar los estudios universitarios. O para recomendar al hijo de un amigo. En los dos casos la conversación comienza con un “¿Quién era director cuando estabas en el Colegio?” Y a partir de ahí se empieza a hablar de las diferencias, de lo mucho que han cambiado las cosas, etc. Nos alegra ese reencuentro y ver como con el paso del tiempo se valoran más algunas cosas que en su momento no se entendían.

Pero hay otros casos que nos llenan de una alegría mayor a los que estamos en el equipo de dirección. Uno de estos ha sido el correo electrónico que recibí el pasado 22 de mayo. Lo escribía Rafael Berral. Estudió arquitectura en el CEU. Fue un alumno brillante en lo referente a la carrera. Un colegial con un espíritu entre genial y artístico. Pero cumplidor y trabajador como, en general, lo son todos los que estudian arquitectura. En el Colegio colaboró en muchas cosas. Y le vimos hacer algunas interpretaciones brillantes en el teatro. Hasta supo solventar sin que casi se notase en una representación la rotura del sofá en que estaba sentado junto a la protagonista de la obra.

Nos escribe para decirnos que acaba de entregar el proyecto fin de carrera. Ha sido un trabajo complicado. Los paneles, donde se puede ver el proyecto en toda su dimensión, se encuentran en el blog que el mismo Rafael ha ido escribiendo a lo largo del tiempo en que ha estado trabajando el proyecto: http://chinanizacion.blogspot.com. Además, esos paneles terminarán decorando algunas de las salas del Jaime del Amo, según nos ha prometido el mismo Rafa.

Y nos informa también de que el proyecto ha merecido un diez y matrícula de honor en su escuela. Es la primera vez que se concede esa calificación en la historia de la escuela. Y es un honor, valga la redundancia, para el Colegio Mayor Jaime del Amo que haya sido un colegial del Jaime el primero en merecer esa calificación. Estos días ha venido por el Colegio y nos ha informado también de que pronto se irá a Milán donde ya le está esperando un trabajo.

Enhorabuena a Rafa y a su familia. Los que estamos al cargo de este Colegio Mayor nos sentimos también llenos de alegría con ese resultado. Es un ejemplo de los buenos para los actuales y futuros colegiales del Jaime. Gracias, Rafa, por tu carta. Y que lleguen muchas como la tuya.