Los que se van y los que vienen

Hoy día 22 de mayo, tras concluir los exámenes, deja el colegio, hasta el próximo mes de septiembre, el primer colegial. A lo largo de esta semana le seguirán otros. Este sencillo hecho, al que podemos unir la celebración de la Gala de Actividades Deportivas ayer noche, y el Acto de Clausura de la Asociación de Actividades Conjuntas de los Colegios Mayores de esta noche, marcan el final del curso. Quedarán sólo días de estudio, de alguna emoción deportiva, de recogidas y paulatinas despedidas.

Los días que esperan, por tanto, tendrán la peculiaridad de ser un entrecruzarse de intereses. Por un lado el respiro de los que con sus buenos resultados proyectan las vacaciones; por otro, los que agobiados, están dedicados día y noche al estudio; y están también los aspirantes a entrar en nuestro colegio, y que llaman a nuestra puerta solicitando una plaza para el próximo curso.

A los que dejan el colegio, por unos meses o definitivamente, sólo me queda pedirles que se detengan y valoren lo que han vivido. Algunos lo habéis hecho al pedir la renovación. Nueve meses en el Mayor da mucha vida: convivencia con compañeros muy distintos, participación en actividades nuevas, conversaciones interminables, la responsabilidad de unos estudios y la propia personal. En mayor o menor grado, habéis crecido y madurado, y esto seguro lo notan vuestros padres.

En este cruzarse de los que aquí vivís y de los que se acercan para conocer nuestro colegio, quiero detenerme. Ya expresé, en el Acto de Clausura, cómo los padres de candidatos a colegiales aprecian la educación y el cariño que respiran al cruzarse con vosotros. Quiero agradecer estos gestos, así como el cariño con el que vosotros mismos les enseñáis el Colegio. Este empezar a tender puentes es otro modo muy valioso de colaborar en el futuro colegial. No sólo hacéis de guías por unas instalaciones como si fuese un museo. Son vuestros comentarios, vuestra forma de relacionaros, de hablar, el cariño con el que habláis de vuestra vida aquí, lo que me parece muy importante, porque además lo hacéis muy bien. Mostráis el colegio no sólo como un lugar donde residir, sino donde vivir más intensamente, de estudiar, pero también de hacer amigos, de crecer y madurar como personas.

Desde aquí quiero dar las gracias a quienes aportáis este granito de arena. Gracias por vuestra disponibilidad y amabilidad, por hacer un hueco en medio de vuestras urgencias académicas, en estos momentos no fáciles. Por todo ello, no descartamos que en el futuro, también con vuestra aportación, colaboréis a valorar quién es más digno de ser futuro miembro de nuestra comunidad colegial.

P. Teodoro Bahillo Ruiz cmf