El tipo de Colegio que debe ser el Jaime del Amo está delineado en el Proyecto Educativo. Sobre eso, es de suponer que nadie tiene la más mínima duda. En la Ciudad Universitaria y propios o adscritos a la universidad Complutense hay casi 40 colegios mayores. Si añadimos los que pertenecen a otras universidades madrileñas llegamos casi a 50 colegios. Son incontables las residencias universitarias del más diverso estilo.
En unos se atiende más a unos valores. En otros se subrayan más otros. Todos los colegios mayores son buenos. Todos son centros donde hay buenos colegiales (y también algunos malos, como es natural). Hay algunos que carecen de proyecto educativo y son apenas lugares de residencia donde se proporciona a los colegiales los medios para realizar actividades deportivas y/o culturales. Repito que en todos ellos hay buenos muchachos y muchachas, jóvenes que trabajan y sacan adelante sus estudios.
Hay Colegios Mayores y Residencias donde el estilo lo marcan los residentes. Son ellos los que determinan lo que hay que hacer, los que fijan el reglamento, etc. En ese contexto los chicos y chicas crecen y maduran. Por supuesto que sí.
Pero hay otros Colegios Mayores donde el estilo de educación lo da el mismo Colegio Mayor a través de su Proyecto Educativo. No es una agenda oculta. En nuestro caso está publicado en la página web de nuestro Colegio. Todos, colegiales y familias, lo firman al aceptar la plaza o al solicitar la renovación. Firman que se identifican con lo que en él se dice. Firman que lo asumen en todos sus puntos.
A partir de ahí es desde donde construimos y hacemos el Colegio. Juntos y en colaboración. La Dirección es responsable de mantener el rumbo. Hay mucho trabajo por hacer todavía. Nuestro lema “Duc in altum” significa “rema más adentro”. En el escudo se ve un barco que navega rumbo a alta mar. El barco está formado por un libro abierto. El estudio es un elemento fundamental pero también lo es la convivencia y el compartir la vida como la comparten los que van en el mismo barco. Queda mucho para llegar al puerto donde podamos descansar. Queda mucho por crecer y madurar, por aprender a ser libres más allá del “hacer lo que me da la gana.” Queda mucho y vamos a seguir trabajando para conseguirlo. Con todas nuestras fuerzas.