En la última semana de Cuaresma, a las puertas del cierre por vacaciones de Semana Santa, el Área de Religiosas asumió el guante de la tradición del rezo del Viacrucis. Recordando el camino de la cruz de Nuestro Señor Jesucristo, los colegiales se preparan y rezan para vivir intensamente la semana de Pascua, en cada una de sus ciudades y casas.
Durante las catorce estaciones del Camino del Calvario, los colegiales recorrieron los espacios comunes de nuestro Mayor, desde los jardines del hasta la «Sala de los directores» acompañando en procesión a la cruz. Comenzando en el pretorio de Pilatos, paso a paso alcanzaron el «Gólgota», siempre acompañados en su ejercicio de pasión por los acordes de una guitarra, voces y rezos de las estaciones. A modo de cierre, aquellos que quisieron pudieron unirse a una adoración de la cruz, simbólica oración del Viernes Santo en que se adora «el árbol de la cruz, en que estuvo clavada la salvación del mundo».
El rezo del Vía Crucis es una gran herramienta para preparar y ayudar a vivir la semana de Pasión. Nos permite a los cristianos acompañar y sentir junto al hijo de Dios los sufrimientos vividos hace dos mil años y traducirlo en clave de nuestras cruces del día a día. Agradecemos al Delegado de Religiosas, colegial de 3er año D. Gabriel Massieu Petit, como a nuestro pastoralista D. Rubén Francisco Moro y D. Jorge Ruiz Aragoneses CMF, la organización del tradicional Vía Crucis de nuestro Colegio Mayor.